martes, 22 de marzo de 2011

NGC 6210























































































NGC 6210
Francisco Martín

NGC 6210 es una estrella gigante roja de la constelación de Hercules a punto de desaparecer entre violentas explosiones a 6500 años luz de la Tierra, este es el nombre que Francisco Martín ha puesto a su exposición en la Galeria Texu, un nombre que nos refiere a un mundo en descomposición presto a desvanecerse. Las figuras de sus dibujos a bolígrafo parecen ser los habitantes de esa estrella moribunda, seres degenerados y atormentados, mitad animales, mitad máquinas que nos recuerdan a las figuras creadas por el diseñador de Alien, el octavo pasajero, H.R. Giger, figuras oscuras y siniestras que en vez de estar llenas de vida estaban llenas de muerte y destrucción. Francisco dibuja seres que a pesar de su deformidad todavía desean vivir, sus cuerpos estan repujados por otros cuerpos, no sé si como amebas que volverían a crecer una vez amputados o como un conjunto de parásitos o simbiontes mejor, ya que parece que todos se benefician unos de otros; surgiendo criaturas bastardas y monstruosas llenas a su vez de otras criaturas no menos degeneradas. Cabellos de serpientes, cabezas de reptiles,caparazones de escarabajos, cuerpos de cefalópodo y garras de águila; entre huesos, dientes, plumas y espinas de pez; todo mezclado con futuristas artilugios mecánicos, ruedas de relojes, cordones, cables, ojos que se salen de las órbitas, ciudades dentro del cráneo, branquias de crustaceo, cadenas, cicatrices, gusanos, peces, colmillos, argollas hasta una ballena gris... Y todo pigmentado por minuciosas decoraciones, entre tatuajes y motivos étnicos o letras de un idioma imaginario; la pluma, en este caso el bolígrafo trabaja incansable no dejando más espacio vacio que el aire donde viven estos seres mitológicos. Es un trabajo casi de filigrana donde el ilustrador se luce haciendo que nos perdamos dentro de esos cuerpos atormentados.
La raspa de un pez convertida en submarino, besos furiosos entre dos cabezas que parecen salidas de un bestiario medieval... Solo hay pequeñas gotas en color, como si fuesen monstruos ya albinos por la falta de luz o por la falta de sangre, como si fuesen milenarios vampiros que en vez de piel tuviesen cuero o pergamino y que en vez de venas llenas de sangre tuviesen tubos rellenos de ácido; y que en vez de huesos; émbolos y bielas los hiciesen moverse.
Figuras entre el surrealismo evocador y decorativo de Dali y el realismo fantástico de Erns Fuchs, aunque en los cuadros visionario-psicodélicos de este domine el colorido sobre la línea. Le pregunté a un especialista en cómic, a Angux el de http://lacaravinieta.blogspot.com/ y http://autoresenobras.blogspot.com/ que le sugerían los dibujos y me respondió que a él le recordaban, salvando las distancias, a algunas ilustraciones de Enki Bilal. Los personajes de Francisco Martín podrían vagar entre las construcciones de Moebius o Jodorowsky para Dune, o por las misteriosas ciudades de Shaun Tan herederas de la Metrópolis de Fritz Lang, todo en blancos, grises y negros, como estas figuras furiosamente solitarias, aisladas, tal vez los últimos de su especie, de un universo presto desaparecer, tal vez metáfora de nuestras vidas de trabajo y soledad aunque estemos rodeados por la multitud del hormiguero.

Epílogo.
Está a punto de explotar el nucleo, ya todos lo sabemos, Kopff, Donati y Chiron intentan escapar subiendose a una nave proyectil, pero las emanaciones de gases y los temblores del suelo hacen imposible el despegue. Atras quedan MZ 23 y tantos amigos, y los habitantes de otras estaciones planetarias.
Ya que no es posible la huida, se refugían en los últimos días de su vida. Tal vez ahora tengan tiempo para decirse lo que nunca se dijeron, para amarse... antes de desvanecerse.

http://www.galeriatexu.com/PROGRAMA/exposiciones/2011_03-07/Fco_Martin/Fco_Martin.htm
http://frankanira.blogspot.com/

No hay comentarios:

Publicar un comentario