martes, 31 de marzo de 2009

El infierno de los amantes crueles


Sandro Botticelli (1445-1510) recibió el encargo de Lorenzo el Magnifico de pintar cuatro paneles decorativos para un regalo de boda de dos de las familias mas importantes de Florencia en 1483.
El pintor recreo una de las historias del Decameron de Boccaccio, escrita cien años antes, en la misma ciudad, asolada por la peste entonces. Era la primera obra renacentista, absolutamente profana, ordenada quemar por Savonarola, tras la "edad de oro" de los Médicis, en la Hoguera de las vanidades la misma en la que ardieron varias pinturas de Botticelli.
Es la historia de un joven que rechazado por su amada dilapida su fortuna, obligado por sus amigos, se retira al campo para meditar e intentar olvidarla; allí se le aparece una visión en la que una mujer desnuda es perseguida por unos perros y un caballero que le dan caza. Nastagio trata de defender a la mujer pero el caballero le narra la historia de su condenación por haberse suicidado de amor a la joven que al enterarse de su suerte, se burla de el, por lo que es condenada al infierno, donde el despechado le dará caza todos los viernes, arrancándole su insensible corazón, y dándoselo a comer a los perros. El joven aprovecha esta visión para organizar una fiesta de despedida con su amada y sus familiares, para convencerlos de las virtudes del matrimonio, un viernes de cacería.

Equipara Boccaccio la actividad aristocrática de la caza con el rapto de las mujeres. Los burgueses florentinos adoptan las formas feudales para considerarse a si mismos los herederos directos de las antiguas aristocracias guerreras, aceptando de esta forma las valoraciones sobre la mujer y el matrimonio que en el medievo sirvieron para asegurar el poder de los nobles basada en el linaje, mediante la distinción entre hijo legitimo y bastardo. Gracias al matrimonio religioso se aseguraban el patrimonio a través de la sangre mediante la herencia, a cambio de asumir la moral sexual del sacramento.

La decoración de una spalliera era un encargo menor para un pintor de su prestigio, lo que explica que su participación fuera parcial, dejando a su taller gran parte del trabajo, su tarea se centra en el diseño de las composiciones y en la ejecución de ciertas figuras como la de Nastagio pensativo en la primera tabla, la mujer desnuda mordida por los canes o en el blanco caballo. Es en esas figuras donde se puede apreciar la elegancia de su canon esbelto, de las líneas serpenteantes que enmarcan las figuras, de unos tonos nacarados, traslúcidos en la desnudez que resaltan la ingravidez, la atemporalidad de los personajes y su carácter melancólico, unas características que serán muy apreciadas por los románticos y los prerrafaelistas ingleses del siglo XIX.
Como integrante del brillante círculo intelectual y artístico de la corte de Lorenzo de Medici, Botticelli recibió las influencias de Marcelo Ficino, director de la Academia Neoplatónica de Florencia y de Pico della Mirandola (a los veintitrés años secuestró a la mujer de uno de los Médicis y publica El discurso sobre la dignidad del hombre, donde se formulan los ideales del Renacimiento) que pretendían conciliar las ideas cristianas con las de la Antigüedad clásica, verdadera raíz del cristianismo, por lo que fueron condenados de herejía, excomulgados y encarcelados.
Destruido el imperio de los Médicis y muerto el monje Savonarola en la hoguera que el mismo había prendido, el maestro es acusado de sodomía por uno de sus discípulos, y muere en la pobreza.

sábado, 28 de marzo de 2009

Una historia



Me han contado una historia, que me ha dejado mudo, ha anulado toda mi mierda, y me ha hecho vomitar; me gustaría contarla pero no puedo, tampoco sabría hacerlo, pero os diré, que es una historia donde se presenta el mal puro, sin disfraz, en cuerpo y alma, y en donde los rayos del sol sólo salen para quemar los ojos.

Es la historia de un hijo de puta con pistola y cuernos de charol; y la de alguien que lo dio todo y lo perdió todo, de alguien que apostó por el amor y encontró el infierno. Cuando sabes lo que ha pasado, y lo que puede pasar, ¿qué es lo que puedes hacer, maldecir, estrangular el llanto, seguir cabizbajo por la calle pensando en cómo es posible?
Sólo nos queda esperar que el cabrón pague. Pero... ¿cual es el precio?

foto Fracesca Woodman

jueves, 26 de marzo de 2009

Matemáticas



"—Disputo la razón extraída del estudio de las matemáticas. Las matemáticas son la ciencia de la forma y la cantidad; el razonamiento matemático es simplemente la lógica aplicada a la observación a la forma y la cantidad. El gran error consiste en suponer que hasta las verdades de lo que es llamado álgebra pura son verdades abstractas o generales. Y este error es tan extraordinario, que me confundo ante la universalidad con que ha sido recibido. Los axiomas matemáticos no son axiomas de validez general. Lo que es verdad de relación (de forma y de cantidad), es a menudo grandemente es falso respecto a la moral, por ejemplo. En esta última ciencia por lo general es incierto que el todo sea igual a la suma de las partes. En química el axioma falla también. En el caso de una fuerza motriz falla igualmente, pues dos motores de un valor dado no alcanzan necesariamente al sumarse una potencia igual a la suma de sus potencias consideradas por separado. Hay muchas otras verdades matemáticas, que son verdades únicamente dentro de los límites de la relación. Pero el matemático arguye, apoyándose en sus verdades finitas, según es costumbre, como si ellas fueran de una aplicabilidad absolutamente general, como si el mundo imaginara, en realidad, que lo son."

Edgar Allan Poe.- La carta robada.

F
















foto X-C



F de fracaso, de falsas esperanzas, porque nunca queremos ver la cara oculta de la Luna, siempre pensamos que es un mal momento, que no puede ser así, que nos merecemos otra cosa, que al final todo se arregla, aunque lo único cierto del final, es que se muere como se sueña, solo.
F de fallaste corazón, no vuelvas a apostar.
F de femoral por la que se te va la vida en cada latido del alma.
F de felicidad, esa mentira que venden en la tienda de viajes de El Corte Inglés, con el traje y la tarta.
F de fue bueno mientras duró , pero, ¿si nunca fue bueno? y, ¿si lo único duro era tu corazón?
F de fortín, ese sitio en el que te escondías, no se de qué.
F de fantasía, ese sueño en la paz y el amor mientras la fiera da vueltas a tu alrededor en la jaula.
F de fiesta, de cuando suena el clarín y te pinchan y te rajan, te acuchillan, y luego arrastran tu cadáver, se limpian la sangre y sacan a pasear los trofeos.
F de fantasma, ese que se me aparece todas las noches y todo el día.



lunes, 23 de marzo de 2009

Una joven rumana


Barcelona 17-03-2009
La policía catalana ha detenido a quince personas pertenecientes a un gang albanés que se dedicaba a la trata de blancas. Entre los arrestados se encuentran los dueños de varios conocidos burdeles de Tarragona.
La pista que siguieron fue proporcionada por una chica, de nacionalidad rumana, de veintiún años, que se pasó dos años encerrada en un piso de Barcelona. Los mafiosos la trajeron a España cuando aún era menor, bajo engaño, y la obligaron a prostituirse. Al ser liberada la chica colaboró con la policía, denunciando a alguno de sus negreros.

Barcelona 21-03-2009
La titular del Juzgado de Instrucción número 33 de Barcelona, Elisabet Castelló, ordenó la prisión incondicional para Andrés Otero, ex inspector de la Unidad Contra las Redes de Inmigración y Falsedad Documental (UCRIF). Está acusado de los supuestos delitos de cohecho, prevaricación y contra los derechos de los trabajadores por haber cobrado dinero de los propietarios de los prostíbulos Saratoga y Riviera de Castelldefels a cambio de permitir la explotación sexual de las mujeres.
Su encarcelamiento se suma al del inspector de policía José Javier Martín Puyal, que había sido el jefe del grupo de Extarnjería de Barcelona. La juez también acordó la prisión eludible con fianza de 2.500 euros para Abundio Navas, jefe de la UCRIF en Barcelona, por falsedad, prevaricación y favorecimiento de la prostitución.

¿Qué pasaría si la prostitución fuese legal? Para empezar tendrían que declarar a Hacienda por sus actividades económicas, y las trabajadoras tendrían que ser dadas de alta en la Seguridad Social; con lo cual saldría a la luz una gran cantidad de dinero negro y se daría una seguridad y una atención sanitaria a estas mujeres.
¿Le interesaría a alguien esto?
¿Qui prodest la prostitución?

Cae una red albanesa que compraba mujeres para prostituirlas · ELPAÍS.com

viernes, 20 de marzo de 2009

Una puta











Esta mujer tirada en el suelo de una celda de la comisaria municipal de Parma, fue fotografiada por un periodista del diario La Repubblica cuando el alcalde, orgulloso, mostraba a la prensa como se luchaba contra la delincuencia un viernes por la noche; era el día 15 de agosto del año pasado. El concejal de seguridad calificó la fotografía de "instrumental" y añadió: la joven no fue maltratada, "es más jamás había sido tan bien tratada en su vida" y cuando se despertó "le ofrecimos café".

El presidente del Senado italiano, Renato Schifani, pidió que se aclarase el caso porque "la fotografía corre el riesgo de transmitir una imagen de nuestro país distinta de de lo que es en la realidad"

Bastardos.

miércoles, 18 de marzo de 2009

El cuervo






















Edgar Allan Poe
(Boston, 1809 - Baltimore, 1849)
Escritor, poeta, crítico y periodista. Maestro del relato corto con sus cuentos de terror y de ciencia-ficción, y creador de la novela policiaca. Fue el primer escritor americano que intento hacer de la escritura su medio de vida, lo que le llevó a la ruina y la desesperación.
Sus padres eran actores itinerantes, hijos de inmigrantes irlandeses. Le pusieron el nombre de Edgar por un personaje de El Rey Lear, la obra que estaban representando por esas fechas. Poco después de nacer, su padre les abandona, y dos años más tarde su madre muere de tuberculosis. Edgar y sus dos hermanos son repartidos en distintas familias, el es recogido por un matrimonio adinerado —no es un cuento de Charles Dickens— de Ritchmond.
Tiene que abandonar la universidad debido a las deudas del juego, de las que su padrastro no se quiere hacer cargo. La falta de medios le obliga a alistarse en el ejercito, y tras servir dos años como artillero, un enchufe de su padre adoptivo lo incorpora a la academia militar de West Point, de donde será expulsado, lo que provoca que sea desheredado.
En 1835 se casa con su prima Virginia de trece años de edad. En 1845 publica el poema El cuervo y aunque solamente cobró 9 dólares por el, significó un desahogo económico para la familia, ya que le proporcionó el reconocimiento popular. Dos años después, tras una larga enfermedad, su mujer muere de tuberculosis.
El día 3-10-1849 Poe es encontrado moribundo en una taberna de Baltimore (4ª sede electoral de Ryan), rodeado de borrachos, y vestido con unas ropas que no eran las suyas. Era día de elecciones y tal vez formaba parte de los falsos votantes, que los interventores de los partidos políticos encerraban y emborrachaban en las tabernas para hacerles votar varias veces a cambio de unas monedas. Falleció cuatro días después, poseído por el delirium tremens, extenuado de chillar pidiendo que le volasen los sesos.
Su tío (una de las cuatro personas que asistió al funeral) declaró tras el entierro: "había conocido tanto dolor y tenía tan pocos motivos para sentirse satisfecho con la vida que este cambio apenas puede considerarse una desgracia"
La ginebra, la absenta y el láudano le permitieron penetrar en los abismos del alma pero el precio que hay que pagar por esos instantes de lucidez alcohólica es demasiado caro y en el camino, plagado de peligros, dejó su vida. A cambio,
su obra fue la referencia de toda la literatura moderna.
"Muchas veces he pensado que podía oír perfectamente el sonido de las tinieblas deslizándose por el horizonte"

El cuervo

Una vez, al filo de una lúgubre media noche,
mientras débil y cansado, en tristes reflexiones embebido,
inclinado sobre un viejo y raro libro de olvidada ciencia,
cabeceando, casi dormido,
oyóse de súbito un leve golpe,
como si suavemente tocaran,
tocaran a la puerta de mi cuarto.
“Es —dije musitando— un visitante
tocando quedo a la puerta de mi cuarto.
Eso es todo, y nada más.”

¡Ah! aquel lúcido recuerdo
de un gélido diciembre;
espectros de brasas moribundas
reflejadas en el suelo;
angustia del deseo del nuevo día;
en vano encareciendo a mis libros
dieran tregua a mi dolor.
Dolor por la pérdida de Leonora, la única,
virgen radiante, Leonora por los ángeles llamada.
Aquí ya sin nombre, para siempre.

Y el crujir triste, vago, escalofriante
de la seda de las cortinas rojas
llenábame de fantásticos terrores
jamás antes sentidos. Y ahora aquí, en pie,
acallando el latido de mi corazón,
vuelvo a repetir:
“Es un visitante a la puerta de mi cuarto
queriendo entrar. Algún visitante
que a deshora a mi cuarto quiere entrar.
Eso es todo, y nada más.”

Ahora, mi ánimo cobraba bríos,
y ya sin titubeos:
“Señor —dije— o señora, en verdad vuestro perdón
imploro,
mas el caso es que, adormilado
cuando vinisteis a tocar quedamente,
tan quedo vinisteis a llamar,
a llamar a la puerta de mi cuarto,
que apenas pude creer que os oía.”
Y entonces abrí de par en par la puerta:
Oscuridad, y nada más.

Escrutando hondo en aquella negrura
permanecí largo rato, atónito, temeroso,
dudando, soñando sueños que ningún mortal
se haya atrevido jamás a soñar.
Mas en el silencio insondable la quietud callaba,
y la única palabra ahí proferida
era el balbuceo de un nombre: “¿Leonora?”
Lo pronuncié en un susurro, y el eco
lo devolvió en un murmullo: “¡Leonora!”
Apenas esto fue, y nada más.

Vuelto a mi cuarto, mi alma toda,
toda mi alma abrasándose dentro de mí,
no tardé en oír de nuevo tocar con mayor fuerza.
“Ciertamente —me dije—, ciertamente
algo sucede en la reja de mi ventana.
Dejad, pues, que vea lo que sucede allí,
y así penetrar pueda en el misterio.
Dejad que a mi corazón llegue un momento el silencio,
y así penetrar pueda en el misterio.”
¡Es el viento, y nada más!

De un golpe abrí la puerta,
y con suave batir de alas, entró
un majestuoso cuervo
de los santos días idos.
Sin asomos de reverencia,
ni un instante quedo;
y con aires de gran señor o de gran dama
fue a posarse en el busto de Palas,
sobre el dintel de mi puerta.
Posado, inmóvil, y nada más.

Entonces, este pájaro de ébano
cambió mis tristes fantasías en una sonrisa
con el grave y severo decoro
del aspecto de que se revestía.
“Aun con tu cresta cercenada y mocha —le dije—,
no serás un cobarde,
hórrido cuervo vetusto y amenazador.
Evadido de la ribera nocturna.
¡Dime cuál es tu nombre en la ribera de la Noche Plutónica!”
Y el Cuervo dijo: “Nunca más.”

Cuánto me asombró que pájaro tan desgarbado
pudiera hablar tan claramente;
aunque poco significaba su respuesta.
Poco pertinente era. Pues no podemos
sino concordar en que ningún ser humano
ha sido antes bendecido con la visión de un pájaro
posado sobre el dintel de su puerta,
pájaro o bestia, posado en el busto esculpido
de Palas en el dintel de su puerta
con semejante nombre: “Nunca más.”

Mas el Cuervo, posado solitario en el sereno busto.
las palabras pronunció, como virtiendo
su alma sólo en esas palabras.
Nada más dijo entonces;
no movió ni una pluma.
Y entonces yo me dije, apenas murmurando:
“Otros amigos se han ido antes;
mañana él también me dejará,
como me abandonaron mis esperanzas.”
Y entonces dijo el pájaro: “Nunca más.”

Sobrecogido al romper el silencio
tan idóneas palabras,
“sin duda —pensé—, sin duda lo que dice
es todo lo que sabe, su solo repertorio, aprendido
de un amo infortunado a quien desastre impío
persiguió, acosó sin dar tregua
hasta que su cantinela sólo tuvo un sentido,
hasta que las endechas de su esperanza
llevaron sólo esa carga melancólica
de ‘Nunca, nunca más’.”


Mas el Cuervo arrancó todavía
de mis tristes fantasías una sonrisa;
acerqué un mullido asiento
frente al pájaro, el busto y la puerta;
y entonces, hundiéndome en el terciopelo,
empecé a enlazar una fantasía con otra,
pensando en lo que este ominoso pájaro de antaño,
lo que este torvo, desgarbado, hórrido,
flaco y ominoso pájaro de antaño
quería decir granzando: “Nunca más.”

En esto cavilaba, sentado, sin pronunciar palabra,
frente al ave cuyos ojos, como-tizones encendidos,
quemaban hasta el fondo de mi pecho.
Esto y más, sentado, adivinaba,
con la cabeza reclinada
en el aterciopelado forro del cojín
acariciado por la luz de la lámpara;
en el forro de terciopelo violeta
acariciado por la luz de la lámpara
¡que ella no oprimiría, ¡ay!, nunca más!

Entonces me pareció que el aire
se tornaba más denso, perfumado
por invisible incensario mecido por serafines
cuyas pisadas tintineaban en el piso alfombrado.
“¡Miserable —dije—, tu Dios te ha concedido,
por estos ángeles te ha otorgado una tregua,
tregua de nepente de tus recuerdos de Leonora!
¡Apura, oh, apura este dulce nepente
y olvida a tu ausente Leonora!”
Y el Cuervo dijo: “Nunca más.”

“¡Profeta!” —exclamé—, ¡cosa diabolica!
¡Profeta, sí, seas pájaro o demonio
enviado por el Tentador, o arrojado
por la tempestad a este refugio desolado e impávido,
a esta desértica tierra encantada,
a este hogar hechizado por el horror!
Profeta, dime, en verdad te lo imploro,
¿hay, dime, hay bálsamo en Galaad?
¡Dime, dime, te imploro!”
Y el cuervo dijo: “Nunca más.”

“¡Profeta! —exclamé—, ¡cosa diabólica!
¡Profeta, sí, seas pájaro o demonio!
¡Por ese cielo que se curva sobre nuestras cabezas,
ese Dios que adoramos tú y yo,
dile a esta alma abrumada de penas si en el remoto Edén
tendrá en sus brazos a una santa doncella
llamada por los ángeles Leonora,
tendrá en sus brazos a una rara y radiante virgen
llamada por los ángeles Leonora!”
Y el cuervo dijo: “Nunca más.”

“¡Sea esa palabra nuestra señal de partida
pájaro o espíritu maligno! —le grité presuntuoso.
¡Vuelve a la tempestad, a la ribera de la Noche Plutónica.
No dejes pluma negra alguna, prenda de la mentira
que profirió tu espíritu!
Deja mi soledad intacta.
Abandona el busto del dintel de mi puerta.
Aparta tu pico de mi corazón
y tu figura del dintel de mi puerta.
Y el Cuervo dijo: “Nunca más.”

Y el Cuervo nunca emprendió el vuelo.
Aún sigue posado, aún sigue posado
en el pálido busto de Palas.
en el dintel de la puerta de mi cuarto.
Y sus ojos tienen la apariencia
de los de un demonio que está soñando.
Y la luz de la lámpara que sobre él se derrama
tiende en el suelo su sombra. Y mi alma,
del fondo de esa sombra que flota sobre el suelo,
no podrá liberarse. ¡Nunca más!

domingo, 15 de marzo de 2009

Extraño fruto

En 1939 el profesor Abel Meeropol, afiliado al Partido Comunista de los Estados Unidos, tras presenciar un linchamiento escribe el poema Bitter Fruit, que publica bajo el seudónimo de Lewis Allan en la revista New York Teacher y en el diario comunista New Masses; más tarde musicó el poema convirtiéndolo en la canción Strange Fruit.

El dueño del Café Internacional le presentó a Billie Holiday y la artista adoptó la canción, siendo el tema con el que cerraba sus actuaciones. Por esas fechas Billie comenzó a consumir heroína de forma habitual, tenía veinticinco años y una voz maravillosa; una voz temblorosa y desgarrada, llena de verdad, parecía la voz del dolor.

Había nacido en un burdel, cuando su madre cumplía trece años. A los diez fue violada y a los doce se tuvo que dedicar a la prostitución. Ella ya no se acordaba de cuantos se la habian follado por unos dólares, aunque su último marido le intentaba buscar buenos clientes.
La metieron en la cárcel y le prohibieron cantar en Nueva York. Murió esposada a una cama, a los 44 años, después de que ningún hospital la quisiera recoger.
Había nacido en Baltimor y toda su vida vivió en el infierno.


Los árboles del sur dan un extraño fruto
de sangre en las hojas y sangre en la raíz,
cuerpos negros balanceándose en la brisa sureña,
como un fruto extraño que cuelga de los álamos.

Escena campestre del sur galante,
los ojos saltones y la boca torcida,
y un dulce y fresco aroma de magnolias,
y de repente el olor a carne quemada.

Aquí está el fruto para que los cuervos lo picoteen,
para que la lluvia lo moje, para que el viento lo sacuda.
Para que el sol lo pudra, para que el árbol lo deje caer,
aquí está la amarga y extraña cosecha.

sábado, 14 de marzo de 2009

Superman

















"¿Por qué siempre la gente más noble es la que más problemas de conciencia tiene? no lo se...

Superman.- Alan More

viernes, 13 de marzo de 2009

E


















E de engaño, de estupidez (la mía). De estrella que explota, una supernova que muere en mil colores para convertirse en un agujero negro. E de elefante que busca donde morir. E de "Hey Joe, ¿adónde vas con esa pistola en la mano?" E de estoy aquí aunque no se para que. E de "el día que a mi me maten que sea de cinco balazos y estar cerca de ti para morir en tus brazos". E de Enola Gay, la bomba que arrasó una ciudad, cuando iba a destruir otra. E de "el calor del establo", ese sitio en el que todos quieren estar. De estropicio. E de elegía, del estropajo con el que me lavan el cadáver. E de entrada para el infierno. E de "En un lugar solitario" (In a Lonely Place). E de en un lugar de La Mancha de cuyo nombre no quiero acordarme vivía un caballero de brillante armadura que se fue en busca del Dorado, pero lo único que encontró fue miseria, y dolor y que tras darlo todo fue engañado y muerto por la verdad.


jueves, 12 de marzo de 2009

Streets of Philadelphia


Herido, maltrecho, sin poder decir lo que sentía.
No sabía quién era el que sobrevivía dentro de mi cuerpo.
Vi mi reflejo en una ventana y no reconocí mi propia cara.
Hermano, ¿vas a dejar que me consuma en las calles de Filadelfia?
Caminé por la avenida hasta que mis piernas se volvieron dos rocas.
Oí las voces de amigos que desaparecían, se iban.
Por la noche escuchaba la sangre en mis venas,
negra y susurrante como la lluvia que cae
sobre las calles de Filadelfia.
Donde ningún ángel me va a saludar,
donde solamente estamos tú y yo, amigo,
y la ropa ya se me resbala.
Caminé mil millas
solamente para naufragar en esta piel.
La noche ha caído y sigo despierto,
contemplando mi desaparición.
No te queda más remedio que recibirme con tu beso infiel;
o tendremos que separarnos así
en las calles de Filadelfia.

Bruce Springsteen

miércoles, 11 de marzo de 2009

No hay vino

foto de X-C
No hay vino bastante, ni sed suficiente.
Me gustaría estar aburrido, pero no es posible; siempre hay pensamientos, recuerdos, deseos, extraños remordimientos y odios profundos.
Sensaciones tan reales, como el agua de la lluvia, y tan frías como el llanto de mi madre.
Caminos oscuros, vacíos, sin luces, sin estrellas, ni tan siquiera caracoles que hagan ruido al pisarlos, ni charcos que me refresquen.
Es un espeso barro, un albañal de mierda, en el que a cada paso me hundo hasta las rodillas y en el que lo único caliente son las babas de los sapos.
Me gustaría oír al padre contar otra vez ese cuento de los panes y los pieses,
ese en el que aparece Dios y te da patadas hasta en el cielo de la boca, hasta que te arrepientes, de no sabes qué.
¿Cuanto puede valer una vida?, ¿cuanto deberían haberme pagado?

martes, 10 de marzo de 2009

Assistens Kirkegard



Miguel Galano retrata el jardín de una iglesia de Copenhague, se trata del cementerio Assistens Kirkegard, donde está enterrado Soren Kirkegard (1813-1855) Con esta obra ganó el premio Ángel de pintura en el año 2006, siendo el premio mejor dotado de la Unión Europea (75.000 €)

Los grises plomizos (parecidos a los asturianos) y la serenidad del lugar atraparon la mirada del pintor. El cuadro nos muestra un sitio de descanso para alguien que no lo conoció en vida. El poeta filósofo había estado marcado por la muerte de su madre y de sus cinco hermanos, de las que se responsabilizaba su padre por haber merecido la ira de Dios.
"Recibí siendo niño una educación rígida y severa que, considerada desde el punto de vista humano, fue una verdadera locura... Siento venirme temblores cuando me detengo a pensar cuál ha sido desde mi más tierna infancia el paisaje de fondo de mi vida, la angustia con que mi padre llenaba mi alma y mi propia y terrible melancolía"

Soren escribe acerca del ser, de la angustia, del vértigo, de la libertad y de la desesperación:
"Soy una individualidad infeliz en el más profundo sentido, cimentado desde el principio en uno u otro sufrimiento en el borde de la locura, un sufrimiento que debe tener su base más profunda en una falta de relación entre mi mente y mi cuerpo"


Como lo fueron Marx y Nietzsche, Kirkegard fue muy crítico con la sociedad burguesa. Pero sus argumentos no estaban relacionados con lo social o con las masas, como lo estaban los de Marx, sino con lo individual. Él descubrió, como más tarde lo hizo Nietzsche, que el individuo corría grave peligro. Pero Nietzsche mantendría que para afirmar al hombre había que negar a Dios, mientras que Kirkegard creía que el hombre accedía a una vida plenamente humana viviendo en el dialogo con Dios.

Destacó las contradicciones y lo absurdo de la vida humana:
"La respuesta individual a esta situación tiene que ser, vivir una existencia comprometida por completo, y este compromiso sólo puede ser entendido por el individuo que lo asume. La angustia lleva a la confrontación del individuo con la nada y con la imposibilidad de encontrar una justificación última para la elección que las personas tenemos que hacer.

"Estar mortalmente enfermo equivale a no poder morirse, ya que la desesperación es la total ausencia de esperanzas, sin que le quede a uno ni siquiera la última esperanza, la esperanza de morir. Pues cuando la muerte es el mayor de todos los peligros, se tienen esperanzas de vida; pero cuando se llega a conocer un peligro todavía más espantoso que la muerte, entonces tiene uno esperanzas de morirse. Y cuando el peligro es tan grande que la muerte misma se convierte en esperanza, entonces tenemos la desesperación como ausencia de todas las esperanzas, incluso la de poder morirse"

Kirkegard descubre el camino que luego seguirán otros, como Heidegger (1889-1976) que escribió un siglo más tarde:
"Nuestra existencia es preocupación surgida de la angustia de vernos proyectados en un mundo en el que tenemos que ser a nuestro pesar. Provenimos de una nada y nos realizamos como un proyecto encaminado hacia la muerte, por eso, la angustia es constitutiva del Dascein, porque es la condición de un ser caído y solitario que no puede contar con Dios ni con remedio alguno a su condición"
"Debemos hacernos responsables de nuestra propia vida. La autenticidad consiste en reconocer que somos un ser para la muerte, única vía de acceso a la libertad"

jueves, 5 de marzo de 2009

Derrota


Toda tu vida te han dicho lo que tenias que hacer, lo que tenias que pensar, y lo que tenias que rezar, y ahora cuando ya eres mayor, cuándo eso ya no te importa nada, cuando tu vida es una mierda, cuando lo único que haces es obedecer, no pensar y rezar, cuando sólo tienes a tus hijos que esperas verlos crecer y que te den esa felicidad que nunca tuviste, que te ayuden a pasar el invierno, ellos vienen y te los quitan, no importó que siempre obedecieses a tu padre a tu marido a tu dios, a ellos no les importa por que tu habías sido enseñada a obedecer y sufrir y lo que tenias que hacer era darles mas siervos, mas soldados, mas almas, Era lo único que tenias y te lo han quitado, no tenias pasado ni presente y ellos te han robado tu futuro. Estás acabada, derrotada, sólo te queda obedecer, no pensar y rezar.

miércoles, 4 de marzo de 2009

Victoria


En la noche siguiente a la batalla de Waterloo, mientras retiraban los cadáveres del campo, el Duque de Wellington paseaba por los restos del infierno y al volver a su tienda escribió: "Nada, salvo una derrota, es tan melancólico como una victoria".
Tras el brutal esfuerzo de los hombres por sobrevivir, de matar antes de ser matados; al rendirse el enemigo, al acabar la carnicería; el cuerpo extenuado, no soporta al cerebro, al alma que aúlla ebria de sangre, es el espíritu que cabalga aunque el jinete ya se ha detenido. El horror que contemplamos y el que acabamos de vivir, es imposible que salga de nosotros a pesar de que ya no tengamos que disparar, acuchillar o cañonear. Hemos sobrevivido pero la parca nos seguirá siempre. Una vez más, la salvación dependerá de la muerte, por eso, una derrota es lo más parecido a una victoria. En la fotografía, una de las primeras imágenes tomadas de una batalla, los cadáveres de los soldados esparcidos por el campo son del ejercito confederado, y aunque el sitio es distinto, Gettysburg, y han pasado casi cincuenta años de lo de Waterloo los muertos son los mismos.

martes, 3 de marzo de 2009

D




















D de Dime algo agradable.
Vienna: Claro. ¿Qué quieres que te diga?
Johnny: Miénteme. Dime que todos estos años me has estado esperando. Dímelo.
Vienna: Todos estos años te he estado esperando.
Johnny: Dime que te habrías muerto si no hubiera regresado
Vienna: Me habría muerto si no hubieses regresado
Johnny: Dime que aún me quieres como yo te quiero a ti.
Vienna: Aún te quiero como tú a mí.
Johnny: Gracias (bebe). Muchas gracias.

D de Dios ha muerto.

D de dictadura de los miserables del corazón, de los que no saben lo que es amar, de los envidiosos, de los que no saben lo que es el compromiso, de los que nos dicen lo que está bien y lo que está mal, de los que saben cuanto cuesta la entrada para el cielo y lo poco que valemos nosotros.
D de desamor, de desesperación, de depresión, de desastre total.
D de ¿dónde estás?
D de La destrucción o el amor.
D de dime porqué.
D de derrota, aún así, los del viva la muerte, venceréis pero nunca convenceréis.
D de "dormir, no despertar más nunca,
poder decir todo acabó; en un sueño
sepultar para siempre los dolores
del corazón, los mil y mil quebrantos
que heredó nuestra carne, ¡quién no ansiara
concluir así! Morir... quedar dormidos...
Dormir... tal vez soñar!"
D de desierto de hielo por el que corren, persiguiéndose, la Criatura y el Doctor Frankestein, buscando el acabar el uno con el otro, para poder salvarse ambos.
D de descenso a los infiernos, de Dante que nos mostró como era y de Dionisios que nos enseño un atajo.
D de Dostoievski "Debemos leer a Dostoievski cuando nos encontremos en un mal momento, cuando hayamos apurado hasta las heces nuestra capacidad de sufrimiento y sintamos que la vida es una herida infinita, abierta y abrasadora, cuando respiremos el aire de la desesperación y hayamos muerto mil muertes de desesperanza. Entonces, cuando solos y desamparados miremos la vida desde el dolor y ya no la comprendamos en toda su salvaje crueldad, cuando ya no esperemos nada, entonces estaremos preparados para oír la música de este poeta terrible y maravilloso" (Hermann Hesse).